
Franco Colapinto en el gran premio de Mónaco: qué posición tendrá en la largada del domingo
Tras su accidentado regreso a la Fórmula 1 en Imola, el piloto argentino llegó hasta donde pudo en las pruebas de clasificación.
La carrera en Monza sirvió para que el piloto argentino volviera a ocupar un lugar en la grilla de partida. Entusiasmo y fuerte apoyo de los fans argentinos.
Deportes19 de mayo de 2025Franco Colapinto vivió un fin de semana inolvidable en el Gran Premio de Emilia-Romaña, donde debutó oficialmente con el equipo Alpine en la Fórmula 1.
Aunque su posición final —16°— no entrará en los libros de historia por lo deportivo, el regreso del piloto bonaerense a la máxima categoría dejó sensaciones muy positivas y mostró una versión más madura, confiada y conectada con el entorno que lo rodea.
El escenario fue el mítico Autódromo Enzo e Dino Ferrari de Imola, donde el piloto argentino volvió a ponerse al volante de un monoplaza de F1, esta vez el A525 del equipo francés. Colapinto cumplió con el principal objetivo que le trazaron: completar la carrera y sumar kilómetros de aprendizaje. Y lo hizo con creces.
A diferencia de sus anteriores pasos por la F1, donde cada minuto en pista parecía una prueba decisiva para su futuro, Franco Colapinto llegó a Alpine sin la presión de una negociación pendiente. Esta vez no se trataba de ganarse un asiento, sino de comenzar a construir un nuevo capítulo en su carrera. Flavio Briatore, asesor ejecutivo de la escudería, fue claro en su bienvenida: "no choques", pidió entre risas, pero con plena confianza en el potencial del argentino.
El equipo no le reprochó su incidente en la clasificación, en la que se despistó tras asegurar su pase al segundo corte. Todo lo contrario: lo arroparon. Incluso compartió una comida con Luca de Meo, CEO del Grupo Renault, dueño de la escudería.
Uno de los puntos destacados del fin de semana fue el vínculo con la prensa y los fanáticos. Alpine flexibilizó el acceso de los medios argentinos, algo que había sido muy limitado cuando Colapinto formaba parte de Williams. Esta apertura permitió al piloto expresarse, relajarse y mostrarse tal como es, fortaleciendo aún más el vínculo con sus seguidores.
Y ese lazo con el público argentino se hizo sentir en Imola. Como en 2024, la bandera celeste y blanca copó las gradas y los fanáticos entonaron el ya clásico “Que de la mano, de Colapinto, todos la vuelta vamos a dar”. Incluso un “marshal” italiano quedó sorprendido por la cantidad de argentinos que fueron a alentar al joven de Pilar.
Más allá del resultado, los datos fueron alentadores. Colapinto marcó un tiempo de vuelta en carrera (1:20.345) más veloz que el de su compañero de equipo, Pierre Gasly (1:20.398), lo que generó comentarios positivos dentro del box francés. Además, en la previa al GP, había sido más rápido que el propio Gasly en las pruebas de simulador.
Todo esto se reflejó en el ambiente dentro de Alpine: gestos distendidos, sonrisas y palabras de aliento. “No fue el resultado que queríamos, pero hicimos lo mejor posible con lo que tenemos”, admitió Franco tras bajarse del auto. Y no exageró: el coche A525 aún tiene mucho por mejorar.
El próximo desafío será nada menos que el Gran Premio de Mónaco, una carrera emblemática del calendario de la F1. Allí, Colapinto jugará de "local", ya que se ha mudado al Principado. Será una nueva oportunidad para seguir aprendiendo, sumando experiencia y consolidándose en un mundo competitivo y exigente.
Franco Colapinto no solo está dando sus primeros pasos como piloto de Fórmula 1: está escribiendo su propia historia con el apoyo incondicional de un país que vuelve a soñar con verlo, algún día, pelear por una victoria en la Máxima. Y ese sueño ya comenzó a rodar en Imola.
Tras su accidentado regreso a la Fórmula 1 en Imola, el piloto argentino llegó hasta donde pudo en las pruebas de clasificación.
Desde las 18.30 el Libertadores de América será sede de un cruce que definirá el primer finalista de la Liga Profesional.