
Es tucumano, huyó de Bolivia donde lo apresaron por narco y vivió como un rey en Famaillá
Hoy Claudio Avalos está prófugo, pero antes de ser descubierto se movió como un empresario que incluso logró acuerdos con municipios tucumanos.
Miguel Ángel Del Río murió este sábado en un enfrentamiento con la policía tras ser visto robando. Era la mano derecha de Rafael Di Zeo en la barrabrava de Boca Juniors.
Policiales07 de noviembre de 2021Cuando Rafael Di Zeo recuperó el poder de La Doce, la barrabrava de Boca Juniors, se rodeó de gente de confianza que le cuidara las espaldas y algunos negocios, y allí apareció en 2015 Miguel Ángel Del Río, quien primero fue custodio y luego el que ocupaba el paravalanchas ya que Rafa tenía derecho de admisión.
Este sábado, quien en los últimos años ganó un poder inusitado en la barra como mano derecha de Di Zeo, falleció en un enfrentamiento con la policía. Según relata Gustavo Grabia en el portal de noticias Infobae, Del Río intentó amenazar y robarle un reloj de alta gama a un hombre importante del mundo financiero porteño, a metros de la casa de Gustavo Posse, intendente de San Isidro.
Un policía, a cargo de la custodia de la residencia, advirtió la situación e intervino. Del Río recibió un tiro en una arteria e intentó escapar en una moto, pero a las cuadras cayó muerto en el asfalto.
Miguel Ángel Del Río había hecho carrera en el mundo de los cobradores a morosos, se movía mucho por las cuevas y era un experto en obtener relojes de alta gama. Así llegó recomendado a La Doce, donde de a poco fue escalando hasta ser el hombre de confianza de Rafael Di Zeo.
Según relata el medio ya citado, Rafa lo llevaba a todas las reuniones, con barras, políticos, fuerzas de seguridad y hasta empresarios, para que lo fueran conociendo y, además, temiendo. La exposición lo puso en la mira de la Justicia, que en marzo del año pasado le aplicó derecho de admisión por dos años. Cuando volvieron los hinchas, hace un mes, volvió a posicionarse al lado de Di Zeo para asegurarse que todas sus órdenes se cumplieran.
Hoy Claudio Avalos está prófugo, pero antes de ser descubierto se movió como un empresario que incluso logró acuerdos con municipios tucumanos.
Una mujer llamó al mediodía a Defensa Civil y aseguró haber dejado un artefacto explosivo en la residencia presidencial. La Brigada Antiexplosivos de la PFA no encontró elementos sospechosos tras rastrillar toda la zona.