Conflicto en el Hospital Garrahan: descuentos, amenazas de despido y reclamos por salarios bajos

Los residentes del Hospital Garrahan enfrentan descuentos salariales por los días de paro tras un reclamo salarial que evidenció los bajos ingresos en comparación con otras jurisdicciones. Durante una prolongada reunión el jueves, los médicos en formación rechazaron la propuesta del Ministerio de Salud de suspender las huelgas durante un período de 48 horas para buscar un acuerdo.

En un acto de protesta, los residentes del Garrahan reafirmaron su decisión de continuar con las medidas de fuerza, justificando su postura en la falta de propuestas tangibles del gobierno y experiencias anteriores de acuerdos incumplidos. "Estamos firmes", declararon, recordando un aumento salarial firmado por el exministro Mario Russo que fue revocado horas más tarde.

Las autoridades de Salud advirtieron que, de continuar el conflicto, se procederá a descontar los días no trabajados. “Los médicos que acumulen cinco días de ausencia serán desafectados,” aseguraron. Además, se mencionó el riesgo de perder la residencia y la prolongación de su formación profesional como consecuencia de las ausencias.

Este viernes, los residentes leyeron una carta abierta frente al hospital. “Necesitamos que se forme a los residentes y que haya más profesionales en el país,” defendieron. Sin embargo, ante la clara necesidad de una recomposición salarial, la respuesta del gobierno fue vaga, indicando que se están evaluando opciones para igualar los salarios de los residentes del Garrahan con los de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Los representantes del Hospital también propusieron establecer una mesa de diálogo con reuniones biocrecientes para abordar estos temas y annonciaron que parte del ahorro generado por la eficiencia del hospital se destinará al incremento en la cantidad de camas, subrayando la importancia del Garrahan como centro de referencia regional.

Una respuesta política más dura se produjo tras los comentarios de Javier Milei, quien redujo los reclamos a una supuesta sobrepoblación de "ñoquis" en el sistema de salud. “La situación se ha politizado,” argumentó, enfatizando que los recursos son limitados a pesar de haber asignado un presupuesto récord.

Frente a estas afirmaciones, Alejandro Lipcovich, secretario general de ATE, destacó que “el 70% del personal es asistencial,” añadiendo que las cifras oficiales del gobierno son inexactas. La administración del hospital está bajo la dirección de Mario Lugones, pero es la viceministra Cecilia Loccisano quien ha estado comunicando la postura del gobierno sobre este conflicto.

Por último, el reclamo económico se vuelve aún más crítico, con los sueldos de enfermería que apenas alcanzan los $900.000 y los de los residentes que no superan los $800.000, mientras que la inflación actual es del 11,6% para 2023. “El personal asistencial es esencial”, reiteró Lipcovich, defendiendo a los trabajadores que mantienen el funcionamiento del Garrahan en condiciones precarias.