La UCA criticó la falta de generación de empleo y afirma que la pobreza seguirá aumentando

El director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina, Agustín Salvia, sostuvo que "el problema estructural del país es por la falta de trabajo".

Economía 06 de mayo de 2021
pobreza

El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina dio a conocer el informe completo titulado “Efectos de la pandemia Covid-19 sobre la dinámica del bienestar en la Argentina urbana”.

El relevamiento arrojó aumentos de la proporción de la población en estado de pobreza de 40,8% en 2019 a 44,2% en 2020. La cifra comprende a 20,3 millones de argentinos y argentinas, según la proyección al total de la población del país.

En ese marco, las cifras de desempleo subieron en el tercer trimestre de 2020 de 10,6% a 14,2%. En términos de cantidad de habitantes significó pasar de casi 2,1 millones de desocupados a poco más de 2,7 millones.

En ese contexto, su director, Agustín Salvia, dijo que “los problemas estructurales de pobreza por ingresos no son por falta de programas sociales sino por falta de trabajo”.

Salvia explicó, “Lo que muestran los datos es que la situación de la pobreza tiene una evolución y viene creciendo desde 2017, aunque ya desde 2011 comienza este proceso. No tenemos un escenario de Covid que llegó y deterioró las condiciones socioeconómicas de la población sino que venimos de un deterioro persistente e incremental. Son 10 años de estancamiento”, puntualizó.

Para el sociólogo e investigador del CONICET, existe un aumento de desigualdades de tres tipos. “Uno es demográfico. Van cayendo más en la indigencia y la pobreza los niños, adolescentes y jóvenes. Los hogares de niños, adolescentes y jóvenes son los que más están siendo afectados en el último período incluido en la era covid. El segundo punto tiene que ver con las regiones. En el conurbano bonaerense es donde más crece la indigencia y la pobreza. Y el tercer componente tiene que ver con la inserción socio ocupacional. Los hogares con tipo de ingresos por el trabajo informal y que dependen de los programas sociales son los más deteriorados”, aseguró.

Según el director del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina, “hay que pensar cómo crear trabajo, porque en realidad se vienen alimentando cada vez más programas sociales sin resolver el problema”.

Salvia afirmó “El IFE y otras asistencias que se están otorgando son programas transitorios, no un ingreso constante como el de un trabajo que permite tener una planificación del presupuesto familiar. Lo que se necesita es recuperar el trabajo”.

Luego agregó: “El mecanismo de salida de dar planes sociales es por la fácil. Es porque no pudiste o no lograste resolver una baja de la pobreza motorizando la reactivación del mercado de trabajo”.

Salvia destacó que en el marco de la pandemia de coronavirus, los indicadores que construyen el índice de pobreza multidimensional más afectados son la educación, la salud y el trabajo.

“La gente no pudo atender la salud frente al escenario de Covid-19 y eso afectó el acceso a los derechos de la salud. Otro factor afectado fue la educación. Más adolescentes tuvieron abandono escolar. Se deterioraron estos tres aspectos, salud, educación y empleo”.

Por último, dijo que la pobreza va a seguir aumentando. “El piso de la pobreza estructural en la Argentina va a ser del 40% en este escenario. Es un piso que va a ser crónico siempre y cuando no se reaccione con generación de empleo. La posibilidad de salir de este estancamiento y crisis social pasa también por el empleo en la micro y mediana empresa”, aseguró.