Se necesitó más de $5 millones durante el 2021 para construir una vivienda

El precio de los materiales subió por encima de la inflación, pero hubo un retroceso en el pago de los salarios de los obreros. Expectativas inflacionarias.

Economía 07 de enero de 2022 Verdadiario Verdadiario
sistema-de-construccion-de-viviendas-de-bajo-costo-03-e1369771380827
constuccion de viviendas inflacion

Durante 2021 el costo de construir una casa económica aumentó $ 1.593.420 para los argentinos. De acuerdo al último informe del Centro de Ingenieros, el costo promedio de una vivienda de 60 m2 con cocina, comedor, dos dormitorios, baño y un lavadero exterior, en diciembre del año pasado llegó a $ 5.378.576, una cifra 42,1% superior a los $ 3.784.620 que se necesitaban doce meses antes de esa fecha.

En el caso de una vivienda más amplia y de mediana calidad, de 136 m2 –con sala de estar, comedor, cocina, lavadero, tres dormitorios y dos baños (uno en suite), distribuidos en dos niveles-, hay que invertir $ 18.278.536, es decir $5.598.756 más (44,15% de suba) que en 2020.

Para el último mes del año 2021, el precio promedio de la construcción sufrió un 43,7% de aumento, una cifra que resulta de la sumatoria de los incrementos de los materiales y costo de la mano de obra. Aunque los números pueden asustar a más de uno, el promedio está por debajo del 51,2% interanual que hasta el mes de noviembre -los datos de diciembre se conocerán recién la próxima semana- acumuló el Índice de Precios al Consumidor.

Para Gerardo Fernández, presidente de la Confederación de Pymes Constructoras de la República Argentina (CPC), el principal motivo por el cual el índice de la construcción se encuentra por debajo del IPC, es que la mano de obra y los honorarios profesionales han quedado relegados. “En realidad los materiales han subido por encima de la inflación, con un promedio superior a 60%. La sumatoria termina quedando por debajo. Esto significa que hubo un retroceso en los ingresos de los obreros de la construcción”, argumentó el empresario.

La corrección de esta situación podría darse a través de las paritarias. Sin embargo, para Fernández existe un gran problema a la hora de negociar: “Hay que corregir las expectativas de inflación, porque en 2021 la mayoría cerró un aumento cercano al 30%, siguiendo lo que había proyectado el ministro Guzmán en el presupuesto, y luego el índice de precios aumentó más de 50%. Por eso todos los trabajadores perdieron”, declaró.

493612Banco Central subió la tasa de interés plazos fijos y Leliq

El economista José Vargas explicó que el mercado de la construcción es “bastante dinámico”. Así, a lo largo del año se dieron diversas situaciones llamativas. En el primer trimestre del 2021, por ejemplo, se vio una aceleración del ritmo de construcción, sobre todo en la parte privada. Luego, la evolución del tipo cambio modificó el panorama, debido a que muchos de los insumos están dolarizados. “A partir de junio, el mercado entró en una meseta que se frenó casi por completo con los picos en la cotización del dólar que tuvimos en octubre”, comentó el especialista.

El costo de construcción aumentó por debajo de los índices de inflación general porque no es un mercado sumamente demandado en épocas como las que estamos viviendo”, explicó.

¿Conviene la inversión en ladrillo?

Para José Vargas, el ahorro en materiales de construcción puede ser una gran alternativa. “Siempre es una alternativa para mantener el poder de compra de los ahorros. Comprar y vender propiedades para lograr hacer una diferencia económica es un tema para entendidos nada más, pero para quien quiere mantener el poder de compra y no tener el dinero en un plazo fijo o en el colchón, es una buena opción invertir en ladrillos. No se logran grandes diferencias, pero se mantiene el poder de compra, algo fundamental”, aseguró.

El acopio de materiales es algo que se ha venido dando muy fuerte en 2021, pero se trata de una práctica en la que se puede entrar en tensión por los precios -que pueden modificarse en cuestión de días- y por la disponibilidad de materiales, para no generar un desabastecimiento”, agregó Vargas.

Por su parte, el titular de la CAC estimó que para un inversor que luego va a vender o alquilar la propiedad, ahorrar en ladrillo da seguridad, pero hoy no es rentable alquilar una vivienda. “Si bien la construcción de una casa ha bajado en su precio en dólares, no hay mercado para ubicar esa propiedad. Lo que puede dar rentabilidad es adquirir materiales. Eso permite resguardar el valor”, comentó el constructor.

La dependencia de la obra pública

Gerardo Fernández se mostró muy entusiasmado con el derrame que puede producir la obra pública en 2022, principalmente aquella derivada de los aportes de Nación. “Las obras que han sido el motor en el 2021 y se espera que lo sigan siendo este año, son las de carácter municipal”, detalló.

Sin embargo, con la obra privada pasa exactamente a la inversa. “Ha sido un año bastante bajo y, por las variables macroeconómicas, va a seguir por este rumbo. Esto se debe a que no hay acceso al crédito y tampoco hay capacidad de ahorro para poder afrontar los gastos. Aunque los precios hayan bajado en su valor en dólares, es inaccesible para los bolsillos”, sostuvo el presidente de la Confederación de Pymes Constructoras de la República Argentina.

Los números avalan el análisis de Fernández. Según la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP). las ventas de cemento a granel, que se asocian a la actividad de la obra pública, crecieron 33% entre enero y noviembre del año pasado, con una racha de once meses positivos consecutivos. Las ventas de cemento en bolsa, que se asocian a la obra privada, crecieron 12% en ese período, pero llevan tres meses de caídas consecutivos.

Perspectivas inflacionarias

Conforme al análisis de los empresarios y lo expresado por José Vargas, lo más probable es que el costo de la construcción en 2022 vuelva a aumentar apenas por debajo del índice general. “Este va a ser un año con una inflación nuevamente bastante elevada, sobre todo si se tiene en cuenta el arrastre de 2021, cómo comenzamos el año, los movimientos del dólar blue al borde del récord y el descongelamiento de tarifas que se ha anunciado. Todo eso va a impactar en un índice que no estará por debajo del 40% con seguridad”, planteó.

Te puede interesar