Nueva escandalosa separación de Daniel Agostini

Daniel Agostini nuevamente protagonista de una escandalosa separación. En la noche del martes que conoció su divorcio de Laura, la mujer con la que tuvo a sus dos hijos más chicos. Según informaron en LAM, hay audios que confirman el maltrato del cantante hacia su ex.

“Es todo muy horrible lo que me contaron, y del entorno de él. Gente que era amiga y tuvo que distanciarse por las cosas que hacía y por cómo la trataba a ella, su mujer, Laura”, contó Fernanda Iglesias.

“Hay audios terribles, de amigos de él que no creían lo que decía Laura entonces pusieron micrófonos, y grabaron. Son audios en los que él decía que quería matar gente, que ella era una pu…, que a Nazarena hasta verla muerta no iba a parar”, aseguró.

Fernanda Iglesias dijo que ella escuchó esos audios: “Esos audios me los hicieron escuchar para que yo también lo crea. Le hizo de todo a la mujer, ella se quiso separar”.

“La trataba mal, no la dejaba salir de la casa, no la dejaba trabajar, la separaba de su familia. Ella se quiso separar y después se divorció, pero él no transa con el tema de la casa que es lo mismo que le hizo a Naza”, contó la panelista.

El conflicto con la casa

“Ellos habían comprado una casa en Canning. Los dos habían puesto plata y la venden para darle la parte a Nazarena, y comprar la casa donde viven ahora. Nazarena termina cediendo y él pone la casa a nombre de él. Entonces, ella (Laura) pierde su parte de la propiedad y él ahora no quiere irse. Los niños viven ahí y cuando ella va, él se va y cuando él está ahí, es ella la que se va”, siguió relatando Iglesias.

Además, un amigo de Agostini reveló que tendría problemas con el juego: “Según me contó un amigo de él, él gastaba fortuna en el juego y otra cosa que me dijo es que se dejaba llenar la cabeza por una macumbera de Villegas que se llama Norma Zárate. Todos los viernes, él iba a hacer rituales de macumba. Él ahora está peleado con casi todos sus amigos y tiene juicios que le iniciaron sus empleados. Está muy fea la cosa. Me dijeron que Laura tiene mucho miedo, y que por eso no quiere hablar. Tiene miedo por sus hijos y por ella”.

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